Cuando las personas comienzan a amarse más a sí mismas cada día, es asombroso cómo sus vidas mejoran. Se sienten mejor. Obtienen los trabajos que quieren. Tienen el dinero que necesitan. Sus relaciones mejoran o las negativas se disuelven y comienzan otras nuevas.
Es una premisa muy simple: amarte a ti misma. Me han criticado por ser demasiado simplista y he descubierto que las cosas simples suelen ser las más profundas.
La vida es un viaje de autodescubrimiento. Para mí, estar iluminada es ir hacia adentro y saber quiénes y qué somos realmente, y saber que tenemos la capacidad de cambiar para mejor amándonos y cuidándonos a nosotras mismas.
No es egoísta amarnos a nosotras mismas. Es importante poder amarnos a nosotras mismas lo suficiente para poder amar a otras personas. Realmente podemos ayudar al planeta cuando venimos de un espacio de gran amor y alegría de forma individual.
El Poder que creó este increíble Universo a menudo se conoce como amor. Dios es amor. A menudo hemos escuchado la declaración: El amor hace girar al mundo. Todo es verdad. El amor es el agente aglutinante que mantiene unido a todo el Universo.
Para mí, el amor es un profundo aprecio. Cuando hablo de amarnos a nosotras mismas, me refiero a tener un profundo aprecio por quienes somos. Aceptamos todas las diferentes partes de nosotras : nuestras pequeñas peculiaridades, las vergüenzas, las cosas que quizás no hagamos tan bien y todas las cualidades maravillosas también.
Desafortunadamente, muchas de nosotras no nos amaremos a nosotras mismas hasta que perdamos peso, o consigamos el trabajo que necesitamos , o el aumento de sueldo, o el novio, o lo que sea. A menudo ponemos condiciones a nuestro amor. Pero podemos cambiar. ¡Podemos amarnos a nosotras mismas como somos ahora mismo!
Estamos en medio de un enorme cambio individual y global. Creo que todos los que vivimos en este momento elegimos estar aquí para ser parte de estos cambios, generar cambios y transformar el mundo de la antigua forma de vida a una existencia más amorosa y pacífica.
En la Era de Piscis buscábamos “allá afuera” a nuestro Salvador: “Sálvame. Sálvame. Por Favor cuídame.” Ahora estamos en la Era de Acuario y estamos aprendiendo a ir hacia adentro para encontrar a nuestro Salvador. Somos el poder que hemos estado buscando.
Si no estás dispuesta a amarte a ti misma hoy, entonces no te amarás a ti misma mañana, porque sea cual sea la excusa que tengas hoy, la tendrás mañana. Tal vez tengas la misma excusa dentro de 20 años, e incluso dejarás esta vida aferrándote a la misma excusa.
El amor es algo que podemos elegir, de la misma manera que elegimos la ira, el odio o la tristeza. Podemos elegir perdonar a alguien que nos ha lastimado y finalmente comenzar a sanar. Podemos optar por estar agradecidos por lo que tenemos. Podemos elegir el amor. Siempre es nuestra elección.
Louise Hay
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