Los problemas menstruales como los calambres y el dolor pueden variar desde molestos hasta debilitantes. A medida que el cuerpo se deshace del revestimiento uterino del último ciclo, te puedes sentir adolorida e incómoda, es posible que experimentes cambios de humor y el dolor puede incluso ser tan intenso que provoque vómitos.
Desafortunadamente, la ayuda médica, especialmente para condiciones como el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis, puede ser difícil de conseguir. Incluso el diagnóstico puede ser difícil de conseguir para condiciones como estas. Sin duda, vale la pena hablar con tu médico acerca de cualquier síntoma grave que experimentes durante tu período, pero también podría ser útil analizar el posible significado espiritual de los problemas menstruales.
UNA PUERTA PARA LIBERAR
En primer lugar, cuando las mujeres estamos menstruando, estamos un poco más abiertas, tanto física como energéticamente hablando. El cuello uterino se ensancha, lo que puede ser doloroso, y hormonas
específicas hacen que nuestros tendones se aflojen un poco, lo que puede causar dolor de espalda.
La vagina y el suelo pélvico pueden considerarse como una puerta de entrada para regular la energía del cuerpo. Pueden traer energía, y cuando estamos abiertas de esta manera, somos mucho más sensibles a
recibir la energía de otras personas.
Esta puerta de entrada energética también es responsable de liberar energía durante la menstruación. Esto es algo bueno, y es una lástima que nuestra cultura no honre la magia de este lanzamiento. Tener un
período significa que podemos dejar de lado lo que sucedió durante el último ciclo. A veces esa liberación duele. Sin embargo, cuando nos apoyamos en él, puede ser hermoso.
Durante este tiempo, el cuerpo de una mujer se siente diferente que en otros momentos de su ciclo. Vivimos en una cultura que insiste en que seamos lo más productivas posible en todo momento, pero nuestras energías suben y bajan, especialmente cuando estamos haciendo el importante trabajo de liberar la sangre y la energía del último ciclo.
Significado espiritual de los problemas menstruales: qué preguntarse Al explorar el significado espiritual de los problemas menstruales, pregúntate qué es lo que realmente necesitas durante tu período. Todas
somos diferentes, pero aquí hay algunas cosas que les gustan a mucho a los cuerpos que menstrúan:
- Descansar
- Ralentizar actividades
- Un descanso de la interacción social
- Alimentos nutritivos y fáciles de digerir como guisos cocidos, sopas
y té caliente - Calor, especialmente alrededor de la pelvis, como con baños y/o
bolsas de agua caliente - Abrazos y mimos tuyos o de alguien con quien se siente seguro
- Tranquilidad
- Comedia/Risa
- Un descanso de las noticias y los programas de televisión
ruidosos/violentos
Lo más importante, escucha a tu cuerpo tanto como puedas durante este tiempo. Es probable que tu cuerpo ya sepa exactamente lo que necesita y esté tratando de decirte lo qué es.
EXPULSIÓN DE ENERGIA TOXICA
Para algunas mujeres con ciclos menstruales muy intensos, parte de lo que sucede energéticamente es que el cuerpo está tratando de expulsar energía tóxica que puede haber estado allí durante mucho tiempo. Metafóricamente, la endometriosis es un crecimiento excesivo de energía que no debería permanecer en el cuerpo, y la menstruación es el intento del cuerpo de liberarla. Encontrar otras formas de limpiar energéticamente tu espíritu podría ayudar a complementar cualquier otro tratamiento que estés usando para tu endometriosis o períodos difíciles. La limpieza incluye:
- Descansar
- Beber mucha agua
- Realizar una limpieza consciente de cualquier energía que no sea tuya
- Meditar en un “baño de luz” y permitir que la luz limpie tu sistema (visualización)
- Tomar baños de hierbas y sales
- Encender una vela y pasar las manos u otras partes de tu cuerpo por encima de ella, imaginando despejar ese espacio.
- Visita a una sanadora, herbolaria o una terapeuta holística que pueda ayudarte a liberar la vieja energía de otras formas.
- Haciendo una meditación guiada para eliminar energías tóxicas de tu útero.
Navegar por el mundo médico con períodos difíciles puede ser realmente agotador, pero existen tratamientos que pueden ayudar. Contemplar el significado espiritual de los problemas menstruales y tomarse el tiempo para preguntar qué quiere y necesita realmente tu período puede ayudar. Podría resultar que tu período está tratando de ayudarte.
Si gustas, puedes probar estas tres posturas de yoga que pueden aliviar molestias durante la menstruación.
Recuerda respirar conscientemente y no obligar a tu cuerpo a realizar una pose sino más bien guiarlo gentil y amorosamente.
Si gustas, puedes probar estas tres posturas de yoga que pueden aliviar molestias durante la menstruación.
Recuerda respirar conscientemente y no obligar a tu cuerpo a realizar una pose sino más bien guiarlo gentil y amorosamente:
Calma el dolor abdominal
La pose Baddha Konasana disminuye los dolores abdominales.
- Para calmar el dolor abdominal, siéntate juntando las plantas de los pies y sujetándolos con las manos.
- Inspira e inclínate hacia delante al tiempo que expulsas el aire.
Estira la zona lumbar y respira
La postura del feto, Balasana, incide en la zona lumbar y la libera de la tensión, lo que calma la sensación de piernas cansadas
- Arrodíllate y apoya la cabeza en el suelo.
- Coloca los brazos junto al cuerpo con las palmas hacia arriba.
- Respira pausadamente hasta que la intensidad del dolor disminuya.
Relaja y masajea tu espalda
La postura de rodillas al pecho, Pavanamuktasana, libera la tensión de la parte inferior de la espalda y proporciona un masaje que alivia los espasmos menstruales, a veces muy dolorosos. - Tiéndete de espaldas en el suelo y eleva las rodillas abrazándolas hacia el pecho.
- Dibuja círculos con las rodillas juntas de forma que pasen suavemente sobre el abdomen de derecha a izquierda y viceversa.
Relaja y masajea tu espalda
La postura de rodillas al pecho, Pavanamuktasana, libera la tensión de la parte inferior de la espalda y proporciona un masaje que alivia los espasmos menstruales, a veces muy dolorosos.
- Tiéndete de espaldas en el suelo y eleva las rodillas abrazándolas hacia el pecho.
- Dibuja círculos con las rodillas juntas de forma que pasen suavemente sobre el abdomen de derecha a izquierda y viceversa.
